A un año de la brutal represión a los vecinos del Barrio Malvinas de Jujuy
El 17 de octubre se cumple un año de la brutal represión a la que fueron sometidos los vecinos del Barrio Malvinas de Jujuy. Es necesario recordar que en esos días de octubre, niños, mujeres y ancianos de ese barrio de la provincia fueron brutalmente golpeados por la policía del gobernador Eduardo Fellner.
Desde hace años los vecinos del Barrio Malvinas vienen peleando para el traslado de una subestación eléctrica que tienen instalada en medio del barrio, la que genera enfermedades y muertos. El Gobierno provincial no solo no escuchó a la gente sino que intentó ampliar su potencia y para ello resolvió llevar un nuevo tendido de cables de media tensión atravesando gran parte del barrio.
Los vecinos resistieron ese intento de la empresa Ejesa y las autoridades contestaron con balas de gomas y gases.
Hoy, a un año de los hechos represivos, numerosos vecinos del Barrio Malvinas de Jujuy fueron convocados por la Justicia para hacerles conocer que se encuentran imputados en una causa por denuncias de Ejesa (empresa eléctrica de la provincia norteña) y la Policía de la provincia que están caratuladas: “Impedimento y entorpecimiento a la prestación normal del servicio eléctrico y atentado calificado a la autoridad” por los hechos del 17/10/12.
Paradójicamente la denuncia sobre las agresiones, golpes, detenciones y daños que recibieron los vecinos por parte de la fuerza de seguridad de Jujuy no tiene ningún trámite y la causa por la salud ambiental del barrio Malvinas no tiene juez competente y está en la Corte Suprema.
Por otro lado, la ordenanza municipal que los vecinos y organizaciones sociales tanto del Barrio Malvinas como de los Naranjos lograron que se aprobara, logrando que las subestaciones eléctricas tuvieran que estar a una distancia mínimas de 150 mts de la población, fue levantada por una medida cautelar que interpuso el Gobierno y un pedido de inconstitucionalidad de la misma.
El amparo judicial de los vecinos de Malvinas desde el mes de mayo está en la Corte Suprema de Justicia de la Nación para resolver un conflicto de competencias, ya que ninguna juez se quiso hacer cargo de la misma.
Este es el camino que han elegido para seguir ignorando y acallando la realidad de que el electromagnetismo enferma y mata.
En Argentina no existen a la fecha normas sanitarias que nos protejan de este particular tipo de contaminación, sólo existen los obsoletos estándares ambientales que rigen para la instalación de estas obras, establecidos en la Resolución 77/1998 de la Secretaría de Energía de la Nación. Por eso debemos redoblar los esfuerzo para exigir el pronto tratamiento del proyecto de Ley de Presupuestos Mínimos de Protección a los Campos Electromagnéticos de Frecuencia Extremadamente Baja para el Sistema de Transporte Eléctrico de Media y Alta Tensión, presentado en el Congreso de la Nación, como así también la sanción de ordenanzas y leyes provinciales que vayan en ese sentido.
